Juego rudo el del amor.

Él se alejaba, caminando sin voltear hacia atrás. Ella se quedo parada donde estaba, derramando lágrimas.
Se había derrumbado. No sabia que hacer. En esa situación lo único que podía hacer era llorar. Se sentía sola. Sabia que no lo estaba. Pero lo sentía. El echo de llorar y que nadie este ahí para consolarte o simplemente darte un fuerte abrazo es abrumador. Te produce una sensacion de soledad. Ella deseaba que alguien esta allí con ella. Quien fuera. Alguien que le diría "todo estará bien"... Palabras sin sentido. Palabras engañosas.
 Ya no lo tenia. Si no lo tenia a él, ¿a quien tenia? "No seas tonta, tienes a tus amigos" había dicho él. Él no entendía. Los amigos servían para consolar. Estaban ahí para acompañarte. Pero ella sabia que solo lo necesitaba a él. Él realmente le importaba. Y verlo irse como si nada le había roto el corazón. Se sentía triste. Pero por parte también furiosa. Ella había confiado en él. Ella había tratado de cambiar para él. Él había sido todo para ella. ¿Y él como le respondía? Rompiéndole el corazón. En el fondo ella sabia que no era culpa de él. Hay cosas que pasan porque tienen que pasar. Destino, le dicen...
 Antes de conocerlo, antes de conocer sus besos, sus caricias, ella no creía en el amor. Vivía en un sueño roto. Vivía en una desilusión. Pero al estar con él, ella sentía que vivía amor. Se sentía feliz. Sentía esa felicidad que solo esa persona especial puede proporcionarte. Y lo había perdido. Juego rudo el del amor!. Juego rudo el del destino.
 Ahí estaba parada. Pensando en todo lo que acababa de perder. En ese momento la voz de su cabeza comenzo a cambiar de actitud. Oh, por dios, era solo un chico. Había miles y tenia toda la vida por delante. Había tenido un hermoso momento de felicidad y había valido la pena. Ahora había pasado y había que seguir adelante. La vida estaba repleta de tropezones, ¿que pasaría si nos detuvieramos en cada uno de ellos? cuando nos caemos hay que levantarse y seguir adelante, esa es la verdad.
Así que eso hiso, se seco las lágrimas, dio la vuelta, dio una ultima mirada hacia atrás y continuo su vida.
Ella vive su vida tal como le gusta. Esta feliz.
 Ella no lo ha olvidado. Pero lo que podría haberse convertido en un mal recuerdo molesto, ahora es un bonito recuerdo que de vez en cuando le gustaba recordar.